Conferencia sobre Lo Inhumano
CICLO DE CINE & FILOSOFÍA
Sábado 2 de noviembre 17hs
TEMA DE LA CONFERENCIA
L O I N H U M A N O
CLÁSICA & MODERNA
Información del Ciclo en YouTube
Sábado 2 DE NOVIEMBRE de 2013 17 A 19 HS
TEMA DE LA CONFERENCIA LO INHUMANO
Se proyectarán fragmentos del film NOCHE Y NIEBLA
de Alain Resnais
Fragmentos del Texto & Imagenes del film
Fragmento del film
A cargo de G u i d o J. M i z r a h i
Maître ès Philosophie
Université de Paris IV-Sorbonne
Auschwitz
La Vida Encerrada
El monstruo Progreso avanza sigiloso aún entre nosotros. Nadie como Hitler puso en práctica esta noción aplicada a la especie humana principal causa de los demás progresos. Hay organismos superiores, hay máquinarias superiores, hay organizaciones superiores. Por pudor se ha preferido negar, que entre los humanos, hay organismos superiores pero se ha preferido conservar la idea- absolutamente indiscutible- de maquinarias superiores. H. fue pionero en poner en práctica viejas ideas de razas superiores y dejó para un desarrollo ulterior la idea fuerte de maquinarias superiores. Esta idea no se mantiene solita: deben haber maquinarias obsoletas, maquinarias viejas, decrepitas, con una clara tendencia a la desaparición radical; una suerte de solución final aplicada a las tecnologías que producen maquinarias obsoletas. El mercado es sinónimo perfecto de campo de concentración. Ante todo es un supuesto lugar de trabajo para obtener la libertad. El arte es un show para los jerarcas, y la cultura una forma de propaganda, de entretenimiento, y finalmente de lugar de encuentro para hablar de negocios. Un momento de descanso, de interrupción de la gran matanza y de la gran hambruna. Es como si allí se dijera: – Qué tal, cómo van los gases? Son efectivos en su rubro? A mí me va bastante bien, son delicados y suaves…Yo les veo las caras, hay algunos que trabajan hace más de 20 años y la decrepitud les llega paulatinamente… Le presento a mi mujer. El enfasis en la importancia de la cultura es el énfasis en ese regocijo de los jerarcas sentados frente a sus bufones, escuchando a sus músicos pero comunicados a sus centrales para ir analizando paso a paso la efectividad de sus gases sobre la gente.
Hay un sorprendente crecimiento de los custodios personales, un refuerzo en la seguridad, y una cada vez más inverosimil justicia. El poder policial in extremis fue un invento de H. Hoy son seres más moderados pero cumpliendo con el mismo objetivo: que lo superior se imponga en el mercado, cueste lo que cueste. Todos somos deportados y los que gobiernan son los jerarcas. El mercado es un inmenso campo de concentración. El marketing una metodología aberrante para imponer lo superior a través de la propaganda. Los individuos están más resignados que nunca a que no haya salida. El mercado los tiene esclavos por todos lados. A veces ofrece trabajo con la promesa de libertad. Y por todos los rincones se ofrecen duchas de felicidad, justicia, libertad, pero en vez de duchas purificadoras, minuciosamente arrecia, imperceptible, un gas que adormece la existencia, la estupidiza, la neutraliza y la obliga a amontonarse torpemente, a pisotearse para encontrar, por algunos breves momentos, un hueco de aire fresco antes de morir. También existe la ducha de la longevidad como forma de neutralizar las decisiones vitales y de creer que se vive mucho. Esa longevidad es un gas. Véase a los gerontes de nuestra época, viejos tontos haciendo turismo, degradados a nada, desde hace años obligados a respirar el gas. Del campo nadie puede salir. Así es la vida hoy. Así es el encierro. El encierro de pensar que no hay ninguna otra salida al sistema liberal de mercado. Desde el punto de vista mental, el deterioro de la resistencia es sorprendente. Las vidas se acomodan con mucha soltura y viven como si nada. Nos asombra cierta entrega y resignación de los judíos a los campos, pero a mí me aterra la entrega inocente y tonta a la vida del mercado. Los rebaños de animales resisten más que los humanos de hoy. Es infame verlos avanzar hacia el gran campo de hoy con la sonrisa y la esperanza de encontrar algún día la libertad. Yo los veo escuálidos de mente, tan flacos y demacrados de espíritu como artificiales y rellenos de cuerpo falso. H. fue el primer productor artista de esos cuerpos flacos mirando con caras de vacas, esperando que americanos salven su tristeza. Hoy sobran esas miradas, sobran esasmiradas, sobran esas tristezas, sobran esas almas escuálidas frente a los alambres de la cosa inexorable, sobran los que esperan la salvación de la forma de vida americana. El nazismo fue un presagio de nuestro tiempo, de lo que se está llevando a cabo en forma absolutamente imperceptible, y de ahí la virulenta reacción y rechazo a todo aquello. De ahí que H. sea el personaje maldito de la historia del siglo. Acaso fue el más intrépido de los artistas, el que llevó hasta el paroxismo la existencia del hombre en el siglo XX. El que dijo y mostró que todos en esta época estamos deportados al campo de concentración con la consigna de trabajar y trabajar con la esperanza de la ducha de libertad. Pero imperceptiblemente hay un gas que nos liquida y no nos damos cuenta. Mientras tanto los jerarcas hacen sus fiestas, gobiernan y miran cómo se mueren gradualmente los deportados. Los empresarios – es decir los fabricantes de estupidez y bostezos- unidos a estos jerarcas se hacen los zonzos. Les conviene. Nadie ha querido mirar sin prejuicios el nazismo y se lo condena de por sí, como si hubiese sido la loca idea de un demente. Yo creo que semejante cosa no puede ser la loca idea de un demente. Tal vez sea lo que somos, tal vez sea la organización de la existencia que hemos preferido realizar y transitar hoy en día sin el brutalismo evidente del nazismo. Quitamos la parte fea para quedarnos con lo demás. Hemos interpuesto a esa brutalidad una perfecta anestesia y miles de distracciones para que nada parezca horroroso. La vida moderna es la conjunción de miles de distracciones. Sin embargo vivimos inmersos en el más siniestro horror desarrollando desenfrenadamente una solución final, no ya contra judíos, sino contra la exitencia en general. No hay vida que no esté deportada al gran campo laboral, y que no deba, tarde o temprano, trabajar y trabajar bajo la melodía de una cultura hipócrita. No hay vida que no sienta el encierro y el tormento de un sistema que no deja salida. La simple idea de que no haya ninguna alternativa concreta al liberalismo no se debe a una falta de ideas. Se debe a la falta de vidas reales que existan en una alternativa concreta. Es exactamente lo que les sucedía a los judios de los campos: lo único que había era el campo y lo único que podía haber era el campo. La vida estaba viciada por los límites que ofrecía el campo de la misma forma que la vida está hoy asfixiada. H. fue un profeta. Su obra escandalizó primero y sigue escandalizando. Sin embargo, paradojicamente, la realidad se ha ido acercando a la visión “espantosa” de la existencia. Las metodologías alemanas se van acercando a los tenues procedimientos actuales en todos los ordenes de la vida. El nazismo se puede entender como una profecía: más que un movimiento político “atroz” del pasado fue una obra anticipatoria del futuro. Que H. haya sido el primer político que viajaba de ciudad a ciudad en avión dando discursos y reuniéndose es un detalle premonitorio. Ya se ven esas almas escuálidas y hambrientas frente a los alambrados-cine, alambrados-conciertos, alambrados-conferencia, alambrados-vacaciones etc. El alambrado es largo y complejo, y frente a él posan las almas escuálidas… flaqueza de almas, extenuación espiritual, debilidad, fragilidad… Esos cuerpos extenuados mirando como vacas fueron visiones premonitorias de almas extenuadas viviendo y muriendo como vacas. Es la razón por la cual esas imágenes impactan tanto en nuestras almas: con horror vemos lo que somos pero disimulamos ese horror con la más exacerbada condena. Hipocresía dirige nuestros destinos individuales… Vean la proliferación de los sitios cerrados, rodeados de alambres de púa, con puestos de vigilancia alrededor, armados, la inquisición del ingreso a extraños… un campo de concentración donde, en lugar de judios desnutridos, encontramos ricos bien nutriditos tomando sol; y afuera, afuera, esa pobreza extraordinaria circunvalando sus dominios… pero en verdad, ¿dónde está esa pobreza?… El nazismo fue el primer movimiento de campos de concentración masivos en distintos puntos del país…es toda una compleja organización de la vida. Ahí dentro crece un tipo de hombre cuyo destino ya está signado por la resignación y la vergüenza, parecido a nuestros hombres, mujeres y niños, que tristez,muy tristez se preparan a morir, ahí dentro tienen sus camarás de gas y sus hornos crematorios … y no muy lejos de ahí se van contruyendo los cementerios cerrados, suerte de barrio cerrado para los cadáveres impecables de las familias adineradas… hasta los cadáveres gozan de prerrogativas en nuestra sociedad… una forma de vivir y de morir…no hay nada más falso que decir que buscan la naturaleza…en verdad son deportados que van a la muerte… Una siniestra organización de la vida que prefiere la muerte sin darse cuenta… Deporte, miles de deportistas, deportados, desposeídos de cuerpo, corriendo detrás de sus penuria…Nunca se ha insistido tanto en la educación física del hombre… hombre-vaca-deportista…lo importante es la musculatura, la carne desarrollada…es una forma de mejorar la raza… el cuerpo del deportista es el modelo de nuestra cultura nazi, el cuerpo de las top-models es el modelo de nuestra cultura aria. Ni en tiempos de Hitler hubo esos desfiles de cuerpos perfectos, esas carnes superiores. Hitler tuvo premoniciones que no pudo poner en práctica en su momento pero que ahora se desarrollan en forma perfecta. No tuvo tiempo…pero siempre habló de mil años de movimiento. Fue un futurólogo mal que nos pese. La organización de la vida actual es una reproducción de la organización nacionalsocialista, hasta en sus mínimos detalles. Vivimos una dictadura tan atroz como imperceptible. Las dictaduras son imperceptibles en sus momentos de apogeo… Todas las caras parece que sonríen de felicidad…aunquen en estos tiempos todas las caras no sonrién, la mayoria cree tenazmente, más que los nazis, en esta organización de la vida…no hay fuerzas de resistencia reales, no hay nada más que personas creyendo en esta organización de la vida… y la fuerza es tal que nadie puede hacer nada sólo. Vivimos silenciados, completamente acobardados, sin recursos de fuerza, sin armas materiales ni espirituales, vivimos en la dulce holgazanería donde no se puede hacer nada. Nos acurrucamos a este estado de cosas. Millones de hombres prefieren hacer deporte, distraerse con su auto, mirar televisión, a modificar este estado de cosas…la vida se ha vuelto indiferencia constante. Propaganda, trabajo: esa es la preocupación principal de los hombres de hoy, progreso, valores morales, cuidado del cuerpo como forma de raza superior, educación… no se sabe para dónde se va con el saber, tal vez en lo único que se piensa es en el trabajo, porque es la única forma de tolerar la existencia esclava… en realidad no se sabe hacia dónde se va con la vida…
Vivimos un nazismo enmascarado, tenue, lento, imperceptible, confortable… nazismo confortable, ameno. La multitud debe pasar desapercibida, debe quedarse en su casa delante del televisor… vean esas caras de frente o de costado, bien erguidas, mirando la pantalla como si fuese la cara del Fuhrer-televisión: esa es la forma de apaciguar al ganado feliz…esas multitudes vacunas, bovinas, ovinas, porcinas…hay una metamorfosis hacia lo vacuno, en la mirada, en los ojos observando fijo y por un rato prolongado… crecimiento del ganado en compensación de una desaparición del pueblo, hombres-vaca, mujeres-vaca; todo un pueblo que se mimetiza con el ganado predominante, en nuestro caso nos parecemos cada vez más a la vacas…no nos damos cuenta del auge de la indiferencia hacia los seres, de la primacía atroz que le damos a esa querida esclavitud económica, esos pequeños sufrimientos cotidianos que nos procura el trabajo, son nuestro bienestar, esas conversaciones sobre el trabajo nos deleitan pues reafirman nuestra condición de esclavos…las galeras contemporáneas son esas conversaciones sobre el trabajito perdido o encontrado… a eso se reduce cada vez más la existencia. La cuestión de la autoglorificación del sistema neoliberal y el nacionalsocialismo. De la importancia que posee la noción de estabilidad política. Whitehead define este estado como un proceso relativamente lento de decadencia atrofiada. También de W.: La base de todos los desacuerdos es alguna experiencia común comprendida de modo opuesto. ¿Y qué del desmembramiento de la familia? En aquellos días se hacía a la fuerza y cada miembro moría en un campo diferente. Describir esas situaciones desgarradoras. Crisis actual de la disgregación de la familia. Terrorismo arquitectónico que hace los lugares inhabitables. Sobre las similitudes de las arquitecturas modernas y la Ciudad Celeste del Apocalípsis véase el ensayo de Deleuze sobre Lawrence:“ la modernidad del apocalipsis no estriba en las catástrofes anunciadas, sino en la autoglorificación programada, la institución de la gloria de la nueva Jerusalem, la instauración demente de un poder último, judicial y moral. Terror arquitectónico de la nueva Jerusalem, con su muralla, su calle mayor de cristal y la ciudad no necesita sol ni luna para iluminarla y nada mancillado penetrará en ella, sino solo aquellos que están inscritos en el libro de la vida de la Oveja”
T É F I L O S Ó F I C O
¿ CÓMO VÉRSELAS CON LA VIDA ?
Ciclo de 33 conferencias
Captar pensamientos & percibir imágenes
Todos los sábados del año de 17 a 19 hs.
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